Las esferas de piedra de Costa Rica

Cómo en muchos lugares de nuestra América Linda, Costa Rica tiene vestigios de culturas antiguas. Algunas de estas ruinas, siguen siendo un misterio, como “Las esferas de piedra”, son un grupo de más de quinientas “petroesferas” precolombinas ubicadas principalmente en el sur de Costa Rica, en la llanura aluvial del delta del río Diquís.

Todo inicia con un grupo étnico de Costa Rica; los bribri, ellos tienen un relato mítico sobre el origen de las esferas de piedra: el dios del trueno Tara, con una inmensa cerbatana, lanzaba estas esferas de piedra a los “serkes” (dioses de los vientos y los huracanes), para alejarlos de las tierras.

También se cuenta que Las esferas de piedra de Costa Rica, guardaban oro y piedras preciosas en su interior, razón por la que algunas fueron destruidas.

Las esferas de piedra de Costa Rica, se consideran la manifestación artística por excelencia de la escultura precolombina costarricense. Su gran valor radica en que, los indígenas que las esculpieron lo hicieron bajo condiciones tecnológicas consideradas muy difíciles -incluso en la actualidad-; sin embargo, su forma es casi perfecta, con acabados muy finos. Se consideran únicas en el mundo por su número (más de 500), tamaño (van desde los pocos centímetros hasta los 2.6 metros de diámetro), peso (algunas alcanzan hasta las 16 toneladas), formación de esquemas y totalmente separadas de algún modelo natural.

Las esferas se hicieron en el periodo 400 - 500 d.C. hasta la conquista española y se descubrieron accidentalmente en 1939. En 2014, la Unesco las eligió como Patrimonio de la Humanidad. El 16 de julio de 2014, la Asamblea Legislativa de Costa Rica las declaró símbolo nacional del país. Un misterio más en la historia de nuestra América Linda.