Los textiles de Bolivia

Cuenta la leyenda que una pequeña tribu estaba buscando un lugar para establecerse. La ciudad tenía que ser fundada en el lugar donde una vara de oro se hundiera y así llegaron a Cuzco, que en quechua significa “el ombligo del mundo”; fue en este lugar donde uno de los hijos del Dios Sol, llamado Manco Capac, les enseñó agricultura y artesanía.

Y es justamente por su artesanía que, Bolivia se ha ganado un lugar relevante a nivel mundial; al ser un país multicultural, sus artesanías van desde hermosos textiles hasta cerámica funcional o decorativa, cuyos orígenes se remontan al período prehispánico.

Los textiles de Bolivia son hechos en telares rústicos, totalmente artesanales, totalmente a mano; en estas artesanías se observa un espléndido y meticuloso trabajo, desde las “chuspas” (bolsas para coca), “aguayos” (mantas para cargar cosas y bebés), hasta los ponchos y fajas.

Hoy en día, los materiales naturales: lana de llama, alpaca u oveja, se mezclan con el acrílico, pero la simbología sigue siendo la misma, son teñidos con colores naturales vivos. Los diseños pasan del surrealismo a la elegancia o la extravagancia, y reflejan historias de la comunidad, símbolos de cultura o sueños de las tejedoras. La artesanía boliviana es una expresión rica en todos los sentidos, digna de ser portada y admirada. Un orgullo más de nuestra #AméricaLinda.